Este delito es más conocido por su nombre en inglés “Grand Theft Auto (GTA)” la razón es porque tiene el mismo nombre que un video juego muy popular en el mercado cuyo personaje principal es un criminal que infringe la ley, y que por lo general, roba autos golpeando y disparando a sus dueños, o tomándolos en las calles. Precisamente, las mismas circunstancias prevé la ley para este delito, cuyas consecuencias legales son bastantes severas.
Si actualmente usted enfrenta acusaciones por este delito es importante que busque asesoría legal inmediata sin importar el escenario que enfrenta. Buscar la ayuda de un profesional a tiempo es beneficioso considerando que hay más tiempo para trabajar en una defensa sólida y además podrá contar con una representación legal desde el inicio y hasta el fin de su proceso para velar que en ninguna etapa se vulneren sus derechos.
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¿Qué supuestos configuran el Grand Theft Auto (GTA)?
El fundamento legal de este hecho punible se encuentra estatuido en la disposición 487(d)(1) contenida en el Código Penal de California, y se define como tomar un vehículo ajeno con el propósito de privar de forma permanente al dueño sobre su propiedad, o por un período de tiempo suficientemente largo como para privarlo de una parte significativa de su uso o disfrute.
En esos términos, los supuestos que configuran el delito son los siguientes:
- El supuesto principal es que, quien no es propietario, haya tomado un auto sin el permiso del verdadero dueño, o que el permiso lo hubiese obtenido a través del engaño o fraude, de lo contrario, si usted estaba debidamente autorizado a tomarlo no habría delito.
- La intención en estos casos es muy importante; puesto que requiere que el criminal tenga la intención de robarlo permanentemente (que nunca lo va a devolver) o que lo haya tomado por un lapso de tiempo de manera que el propietario, se haya visto privado de su derecho sobre el vehículo (por ejemplo, robar un auto para cobrar dinero por su rescate). De lo contrario, si la intención era solo transportarse temporalmente en el vehículo sería materia de otro delito, por ejemplo, tomar el auto de un familiar que estaba de vacaciones sin su permiso para salir de fiesta con unos amigos y posteriormente devolverlo.
- Por último, la forma en que se robó el vehículo automotor es indiferente para configurar el delito, si lo tomó en presencia inmediata del dueño, si lo hizo de forma oculta, cualquier forma configura el delito.
Dicho lo anterior, los siguientes son escenarios bajo los cuales frecuentemente se procesan a personas por el delito objeto de análisis:
- Robar un vehículo con el propósito de desvalijarlo y vender sus piezas
- Robar un vehículo para escapar de la policía
- Retener un vehículo que le fue alquilado cuando venció su periodo para usarlo
- Robar un vehículo para pedir una suma de dinero por su rescate
¿Cuál es el tratamiento legal que recibe este delito?
Muchas personas piensan que por cuanto el delito se llama “Hurto Mayor de Auto” entonces se trata de un delito mayor, sin embargo esto no es así, al delito se le denomina así porque la ley específica que es una de las formas en que se puede cometer un hurto mayor, es decir, que es más grande en magnitud o importancia, pero realmente el tratamiento legal que recibe es de un “wobbler”.
¿Y qué significa un wobbler? que el Fiscal de la acusación puede en la formulación de su cargo calificar el delito como menor o mayor (se tambalea entre esas dos calificaciones, de allí su nombre en inglés), y para llegar a tal conclusión debe observar los detalles que rodean el caso en específico, siendo relevante aspectos como: el valor del auto robado, y si posee o no antecedentes penales por otros delitos.
En lo que respecta al valor del vehículo, dicho aspecto tiene mucha relevancia, ya que, anteriormente robar un auto siempre era un delito mayor, pero a partir del 2014 con la Proposición 47 se previó un tratamiento legal distinto cuando el valor del vehículo no excediera de $950, en cuyo caso constituirá un delito menor.
Sin embargo, el mismo texto normativo de la Proposición 47 establece que dichos crímenes seguirán considerándose como delitos mayores cuando el acusado haya sido condenado previamente por otros delitos graves o violentos, de allí que el Fiscal deba tomar en cuenta los antecedentes penales para calificar el hecho punible.
Así por ejemplo, si el valor del automóvil robado es igual o menor de $950 constituirá un delito menor, pero independientemente del precio, siempre que existan antecedentes penales por delitos violentos o graves, el hecho punible deberá calificarse como mayor.
Ahora bien, independientemente de la calificación bajo la cual se impongan los cargos, el hurto mayor de auto siempre será un delito serio en virtud la rigurosidad con la cual es sancionado, y aunado a ello, por experiencia de nuestros abogados en la materia, este delito casi siempre se califica como mayor ya que casi todos los vehículos (por no decir que todos) sobrepasan el valor de los $950, lo que lo hace una situación legal bastante severa.
¿Qué elementos de procedencia se deben probar para que me condenen por la comisión del delito?
Los elementos de procedencia son circunstancias que deben estar necesariamente en el hecho concreto y que el Fiscal debe demostrar para que se determine su culpabilidad y pueda derivar su responsabilidad penal conforme a la ley.
Para este delito en específico, los elementos que hacen procedente una sentencia condenatoria son los siguientes:
- Que el acusado haya tomado un vehículo del cual no era propietario;
- Que el acusado no estuviera autorizado por el verdadero propietario;
- Que con tal acción el acusado pretendía privar a su propietario de forma permanente, o por un tiempo suficiente como para que se vea privado de usar y disponer de su propiedad; y
- Que el acusado haya movido el vehículo de un lugar a otro.
A continuación explicaremos con más detalles los elementos anteriormente mencionados a fin de abordar los aspectos legales respecto cada uno.
Tomar un vehículo del cual el acusado no era propietario
Es importante mencionar que el Fiscal a cargo de la acusación deberá probar que realmente usted tomó la propiedad, lo cual va más allá de la simple posesión. Por ejemplo, supongamos que usted estuviera en posesión un auto que no le pertenece, esto no significa que usted lo haya tomado, puede que otra persona lo tomó y se lo vendió, alquiló o prestó y usted no sabía que se trataba de un auto robado, en estos casos usted no puede ser responsabilizado por el hecho punible objeto de este artículo.
A fin de demostrar dicho elemento, el Fiscal se puede hacer valer de los videos captados por las cámaras de seguridad y de testigos para argumentar que el acusado intentaba escapar de la policía (lo que es un indicio de que sabía que estaba cometiendo un delito), y de las declaraciones hechas por el acusado durante su arresto (por eso es importante que se ampare en su derecho a permanecer en silencio ya que todo lo que diga puede ser utilizado en su contra).
No obstante, todas las pruebas que se presenten en contra del acusado pueden ser desvirtuadas e incluso desechadas legalmente por el Juez si cuenta con un abogado que ejerza una defensa sólida a su favor.
Otro aspecto de este delito es que lógicamente se requiere que la persona que tomó el vehículo no sea su propietario, de lo contrario no habría lugar a una condena. Esta circunstancia si es un poco más fácil de probar por el fiscal cuando se tiene el título de propiedad del verdadero dueño, no obstante, existen casos donde quizás usted razonablemente pensó que era propietario del vehículo porque, por ejemplo, se lo compró a otra persona, en cuyo caso usted también quedaría exento de responsabilidad penal.
No hubo una autorización por parte del verdadero propietario del vehículo
El Fiscal debe demostrar que, además de que usted tomó el vehículo sin ser el propietario, usted no fue autorizado por éste, de lo contrario, si por ejemplo, el dueño le permitió tomar su vehículo para ir a una fiesta y posteriormente lo denunció por el hecho, se trataría entonces de una falsa acusación y su abogado deberá ejercer una defensa para desvirtuar los argumentos del Fiscal que le acusan de tomar ilegalmente el vehículo.
Ahora bien, un aspecto legal importante en el hecho es que la autorización debe ser expresa, es decir, que haya sido clara, abierta, sin que exista lugar a dudas o se haya dado por sentado o insinuado que usted tenía permiso.
Por otro lado, es importante señalar que no es permitido alegar que usted continuamente utilizaba el vehículo con autorización si ese día en el cual se le acusa de la comisión del delito el propietario no le autorizó. Sin embargo, esto tampoco implica que todos los días usted debiera pedir permiso, si a usted le pusieron a disposición el vehículo por varios días, o se lo asignaron por su trabajo, o estaba autorizado para manejarlo mediante poder, no habría lugar a una condena.
Y por último, vale la pena precisar que en el escenario donde usted haya obtenido la autorización de tomar el vehículo valiéndose del engaño, o de forma fraudulenta, la misma no se tendrá como válida.
Intención de privar a su propietario de forma permanente, o por un tiempo suficiente como para que se vea privado de usar y disponer de su propiedad
Tal como lo señalamos en líneas anteriores el tiempo es sumamente importante en este delito, ya que existe una línea muy delgada entre el hecho punible al que nos estamos refiriendo y la toma o conducción ilegal de un auto que es otro delito regulado y sancionado bajo una norma distinta aunque los supuestos sean bastantes similares.
En ese sentido, el supuesto que debe estar presente en este hecho punible que la persona haya tomado el vehículo con intención de privar de forma permanente al propietario, es decir, usted se lo quitó, arrebató para que más nunca él pudiese disponer de su propiedad, o al menos esa debió ser la intención del criminal. Si el propósito se frustró porque un oficial de la policía logró evitarlo, o usted se arrepintió en el proceso, igualmente se habría configurado el delito porque cuando lo tomó ya tenía la intención.
No obstante, las leyes de California también consideran que este elemento se configura cuando a pesar de que no se tenía intención de privar al dueño permanentemente, el vehículo se haya retenido por un tiempo considerable a tal punto que se le privó al propietario el uso y disposición de su vehículo durante ese tiempo. Por ejemplo, tomar el vehículo para pedir un dinero por su rescate, o para huir en este de una persecución policial y luego dejarlo abandonado, o cualquier otro escenario similar.
La intención de la persona se prueba con los indicios que se puedan recaudar en el hecho, por ejemplo, mensajes de texto del criminal a otra persona que revele lo que se pretendía con tal robo, o sus propias afirmaciones en el momento en que fue arrestado.
Mover el vehículo de un lugar a otro
Para finalizar con los elementos de procedencia, es necesario que el Fiscal pueda demostrar que movió el vehículo de un lugar a otro sin que tenga verdadera relevancia que la distancia recorrida por el vehículo haya sido corta.
Por ejemplo, supongamos que una persona aprovecha el instante en el que una pareja se encuentra de vacaciones para robar su vehículo y venderlo por piezas, pero un vecino se da cuenta de la situación y llama a la policía, en lo que la persona logró abrir el auto, encenderlo, y apenas sacarlo del estacionamiento, justo llega la policía para detenerlo. En este escenario, dado que la persona movió el vehículo, aunque fuera una distancia muy mínima, igual se corre el riesgo de ser acusado por el crimen objeto de este artículo.
¿Qué tan severas son las sanciones que dispone la ley por la comisión de este hecho punible?
Como lo referimos en líneas anteriores, el GTA o hurto mayor de auto es un “wobbler” por lo que el Fiscal, a su entera discreción y observando las circunstancias que rodean el caso, podrá calificarlo como delito menor o delito mayor, y en función de ello, se aplicarán al caso en específico las penalidades que correspondan, siendo más severas si se califica como mayor, y menos severa (aunque sigue siendo bastante rigurosa) en el escenario en que se califique como menor.
No obstante lo anterior, lo común es que el delito se califique como mayor, ya que generalmente los vehículos sobrepasan los $950, en cuyo caso se impondrán las siguientes sanciones:
- Pena de prisión por un periodo de 16 meses, 2 o 3 años; y/o
- Pagar una multa por hasta $10.000.
Pero, la condena máxima de prisión puede incrementarse hasta 4 años si se trata de una reincidencia, es decir, que el condenado tenga registros de haber cometido un crimen previo por hurto mayor de auto.
Por otro lado, si el Fiscal lo califica como delito menor las sanciones disminuyen su severidad en la siguiente medida:
- El periodo máximo de prisión será de hasta 1 año; y
- El valor máximo de la multa es de hasta $1.000.
Cabe señalar que el Juez puede aplicar una o ambas sanciones según su criterio y consideración legal.
¿Este hecho punible prevé mejoras o agravantes de las sanciones?
Las llamadas mejoras o agravantes de las sanciones son circunstancias que no requieren estar presentes en el hecho para que el delito sea procedente, pero que de estarlo, las sanciones pueden llegar a incrementarse. En el caso del hurto mayor de auto es el valor del vehículo que se haya robado según las siguientes reglas:
- Si dicho valor excede los $65.000 se aplicará una condena adicional y consecutiva de prisión por un periodo de 1 año;
- Si el valor excede de los $200.000, la sentencia incluirá 2 años adicionales y consecutivos de prisión.
Otra agravante es que el hurto mayor de auto se haya cometido en beneficio, asociación, o bajo la dirección de una pandilla, en cuyo escenario la sección 186.22 PC prevé una sentencia adicional y consecutiva de entre 15 años de prisión a cadena perpetua.
¿Qué defensas puede emplear un abogado defensor para combatir cargos de esta índole?
Las sanciones que se enfrentan por hurto mayor de auto son bastantes severas, eso sin contar que en el hecho se pudo haber incurrido en otros delitos que complicaría aún más su situación legal. Por esa razón necesitará contar con un abogado con experiencia para combatir sus cargos mediante estrategias de defensas que disminuyan la severidad de las sanciones aplicables o, en el mejor de los escenarios, su caso sea desestimado.
Alguna de las defensas que comúnmente se emplean en estos casos incluyen más no se limitan a las siguientes:
- Falsas acusaciones: esta defensa tiene lugar cuando una persona intenta incriminarlo por un delito que usted no cometió estando motivado por la ira, odio o los celos.
- Falta de intención: en el caso donde usted no tuviera intención de robar el vehículo, sino que hubiere hecho una broma a un amigo, pensó razonablemente que le pertenecía, u otro escenario similar, su abogado defensor podrá alegar que usted no tenía intención de robar el vehículo.
- Usted estaba autorizado por el propietario: por ejemplo, tenía un poder que le autorizaba expresamente a usar el vehículo, o la persona le dio permiso de usar el vehículo cuando lo necesitara.
¿Qué otros delitos se relacionan con el Hurto Mayor de Auto?
Robo (459 PC): este delito implica entrar en un vehículo cerrado, valiéndose de cualquier objeto o instrumento para forzar la cerradura con el propósito de hurtar objetos que estén dentro del mismo, pero no debe conllevar el robo del auto en sí, lo cual lo hace diferente del delito GTA.
Toma o conducción ilegal de un auto (10851 VC): por su parte este delito con mucha frecuencia se confunde con el GTA, por cuanto los supuestos que le configuran son muy similares. Ambos delitos implican apropiarse de un vehículo sin ser propietario y sin tener autorización del dueño, así como mover el vehículo de un lugar a otro aunque fuera a una corta distancia, sin embargo, su diferencia radica en la intención o propósito del preparador del crimen, si está fue privar a propietario de la posesión del auto permanentemente (por ejemplo, porque lo va a desarmar y vender por piezas, o para venderlo a otra persona) o por un periodo lo suficientemente largo como para privar significativamente a su propietario de poseerlo (para pedir dinero por su rescate, o huir de la policía y luego abandonarlo) entonces muy probablemente le acusen de GTA. Pero si su intención fue privar de forma temporal a su dueño (tomarlo para ir a una fiesta y posteriormente devolverlo, o hacerle una broma a su amigo y luego de que reporta la situación a la policía lo encuentren a usted estando en posesión del vehículo) podría ser acusado de tomar o conducir ilegalmente un vehículo.
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Enfrentar una acusación por este hecho punible es una situación legal muchas veces compleja de lidiar, pero con ayuda de los especialistas siempre se puede salir victorioso, bien sea porque el abogado defensor es lo suficientemente hábil y persuasivo como para que el Juez o el Fiscal consideren la disminución de sus cargos, en cuyo caso las sanciones serán menos severas y hayan más posibilidades de salir en libertad condicional; o porque consiguió que sus cargos sean desestimados en su totalidad, y usted no deba sufrir la aplicación de ninguna condena. Pero para lograr todo ello en su caso, necesita contratar cuanto antes a un abogado penalista.
Si enfrenta una acusación de este tipo contacte ahora mismo a nuestro equipo The LA Criminal Defense Law Firm para que un abogado de leyes criminales empiece a trabajar en las posibles soluciones de su caso. Llame ahora al 310-935-1675. ¡Somos los mejores en todo Los Angeles!